Historia y Documentación

El Número de Identificación Fiscal (NIF) en Europa surgió como una herramienta para estandarizar la identificación de contribuyentes dentro de cada país, especialmente en contextos transnacionales. Aunque no existe un formato único en toda la Unión Europea, cada país ha desarrollado su propio sistema, adaptándolo a sus requisitos legales y administrativos.

El NIF es utilizado tanto por personas físicas como jurídicas para la declaración de impuestos, transacciones financieras, y trámites legales. Algunos países, como Italia o Finlandia, emplean algoritmos verificables, mientras que otros, como Alemania, confían en números secuenciales únicos. Su implementación comenzó a popularizarse en la década de 1990, coincidiendo con el aumento de la integración económica en Europa.

Los formatos y métodos de cálculo del NIF varían ampliamente entre los países europeos. A continuación, se detallan las características principales de cada uno de los países indicados:

• Alemania: Número secuencial de 11 dígitos sin algoritmo verificable.
• Austria: Combinación alfanumérica de 9 caracteres, con un dígito de control al final.
• Bélgica: Formato numérico de 11 dígitos, donde los dos últimos son un dígito de control calculado con módulo 97.
• Bulgaria: Número de 10 dígitos, que incluye la fecha de nacimiento y un dígito de control.
• Chipre: NIF alfanumérico de 9 caracteres, con una letra inicial y un dígito de control calculado.
• Dinamarca: Basado en la fecha de nacimiento, consta de 10 dígitos sin dígito de control.
• Eslovaquia: Combinación de 10 dígitos, que incluye la fecha de nacimiento y un dígito de validación opcional.
• Eslovenia: Número secuencial de 8 dígitos con un dígito de control basado en módulo 11.
• Estonia: Número de 11 dígitos que incluye el género, la fecha de nacimiento y un dígito de control calculado.
• Finlandia: Compuesto por la fecha de nacimiento, un carácter separador y un dígito de control calculado con módulo 31.
• Grecia: Número de 9 dígitos, sin algoritmos de validación conocidos.
• Holanda: Número de 9 dígitos, con un dígito de control basado en módulo 11.
• Hungría: Número secuencial de 10 dígitos, que incluye códigos internos para identificación pero sin dígito de control explícito.
• Irlanda: Número de 9 caracteres, alfanumérico, que incluye una letra final como dígito de control.
• Italia: Código alfanumérico de 16 caracteres que incluye letras y números, derivado de datos personales como el nombre y la fecha de nacimiento.
• Letonia: Número de 11 dígitos, que incluye la fecha de nacimiento y un dígito de control calculado con módulo 11.
• Lituania: Número de 11 dígitos que incluye información sobre el género, la fecha de nacimiento y un dígito de control basado en módulo 11.
• Luxemburgo: Número de 13 dígitos, sin algoritmos de validación conocidos.
• Malta: Combinación alfanumérica de hasta 8 caracteres, con un prefijo que indica el tipo de identificación.
• Polonia: Número de 10 dígitos con un dígito de control calculado mediante un sistema ponderado específico.
• Portugal: Formato numérico de 9 dígitos, con un dígito de control calculado mediante módulo 11.
• Reino Unido: Número alfanumérico de hasta 10 caracteres, adaptado para individuos o empresas, pero sin un dígito de control estándar.
• Rumanía: Número de 13 dígitos que incluye el género, el año de nacimiento y un dígito de control calculado con módulo 11.
• Suecia: Formato de 10 o 12 dígitos, basado en la fecha de nacimiento más un número secuencial y un dígito de control calculado con módulo 10.

El uso de dígitos de control, cuando están presentes, asegura la integridad del NIF y minimiza errores en su uso administrativo y fiscal.